Posiblemente ya ha experimentado el pasar por situaciones tan adversas que a donde quiera que voltea ve el escenario gris.
Quizá ha pensado que no le interesa en lo más mínimo a Dios, que Él existe para unos cuantos afortunados, no para usted.
Como dice el refrán “árbol que nace torcido, jamás su rama endereza”.
Cree que nació para fracasar y no lograra salir del fondo en el que se encuentra por más que luche.
Sepa una cosa: las situaciones contrarias que atraviesa nada tienen que ver con el plan de Dios para usted.
Si bien es cierto que no promete una vida sin luchas, también es verdad que Él empeña Su Palabra en ayudarnos a librar cualquier batalla que se nos presente en el camino.
Amigo (a) lector, recuerde una cosa: la Voluntad de Dios jamás lo llevara donde su gracia no lo proteja. Él siempre velará por usted, siempre y cuando se lo permita.
“Esforzaos y cobrad animo; no temáis, ni tengáis miedo de ellos, porque el Señor tu Dios es el que va contigo; no te dejara, ni te desamparara”.(Deuteronomio 31:6)
Si atraviesa circunstancias difíciles, no se desanime, encomiende su causa a Dios para que lo ayude.
Estando a su lado no tiene nada que temer porque Él cuidara de cada uno de sus pasos.
“Confía en Dios, y haz el bien, y habitaras en la tierra y te apacentaras en la verdad.”
Salmos 37:3
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